Nosotros combatimos el calor aligerándonos de ropa, los perros lo hacen mediante el jadeo y la muda, pero algunas razas en un curioso proceso evolutivo se han desprendido del pelo. Son los llamados perros sin pelo, en su mayoría de pequeño tamaño.
Perros pequeños sin pelo
Perros pequeños sin pelo existen en África, Turquía, China, Filipinas y México, y a todos se les atribuye un origen oriental.
Esta peculiaridad facilitó su protección como curiosidad, logrando sobrevivir.
El exotismo de estas regiones les ha otorgado un áurea de singularidad y misterio. En algunas de estas razas, como el crestado chino, la longitud del pelo existente nos hace suponer que originalmente se trataba de perros de manto largo y sedoso.
El pelo, como protector de la piel, tiene una gran importancia en el perro, ya que le ha permitido adaptarse al clima en regiones tan distintas como el ártico o los desiertos. Puede ser largo como en los perros originarios de países fríos (samoyedo), corto como en los que habitan países cálidos (podenco), rizado como en los perros de agua (Caniches); alambrado como en algunos terriers e incluso carecer de pelo.
Los genetistas consideran la ausencia de pelo como una adaptación al medio a través de la selección natural.
La ausencia de pelo fue una mutación transmitida de una generación a otra.
Como esta mutación no era contraria a la supervivencia y otorgaba un aspecto curioso al perro, fue conservada y promocionada por los propietarios. La ausencia de pelo es debido a la presencia de un gen dominante recesivo que provoca una displasia dérmica e hiperpigmentación de la piel desnuda. Frecuentemente la alopecia va acompañada de otros fenómenos como la ausencia de algunos premolares e incluso incisivos. Al cruzar dos ejemplares pelones no siempre el resultado será sujetos sin pelo.
En las camadas de perros desnudos aparecen con frecuencia cachorros sin pelo junto a otros con el cuerpo totalmente recubierto de pelo o con una hermosa cresta peluda en la frente. Incluso los perros totalmente desnudos tienen un bello ligero en la cabeza y entre los dedos. En casi todos los países de América central y del Sur existen variedades locales de perros sin pelo.
En Latinoamérica nunca hubo mucho interés por estas razas, se los consideraba perro de los campesinos y las clases acomodadas preferían los perros importados de Europa y Estados Unidos.
Los denominados perros sin pelo son animales muy sensibles y afectuosos. Detestan los gritos y la violencia y expresan su malestar silenciosamente, con una mirada triste y entregada. Su gran enemigo es el frío, como es de esperar en perros sin la protección de un manto aislante, por lo que deben protegerse de las bajas temperaturas.
Les encanta el bienestar y pueden pasar largas horas junto a una estufa o entre mullidas mantas. Su piel es muy sensible al sol, por lo que una exposición prolongada bajo sus rayos les provoca graves quemaduras.
En verano es conveniente aplicarles en la piel una crema con alto factor de protección a la luz solar.
Razas de perros sin pelo
Xoloitzcuintle
Originario de México, su nombre procede del nombre del dios Xolotl (señor del inframundo) y el vocablo Iticuintli (perro) por lo tanto es el perro del dios Xolotl. Este perro está presente en la iconografía prehispánica de un modo permanente, lo vemos representado en la cerámica, las esculturas y los códices ligado a los ritos y mitos religiosos.
Los pintores mexicanos Diego Rivera y Frida Kahlo, hoy descubiertos por el gran público por el poder mediático del cine, fueron aficionados al xoloitzcuintle. Frida Kahlo reprodujo en varias obras estos perros, como en la popular «el abrazo de amor de El universo, la Tierra (México), Yo, Diego y el señor Xolotl”, en el que este último es un perro desnudo. Especialmente representativo es su óleo sobre lienzo de 1938 “Perro Iticuintli conmigo”, que reproduce un ejemplar desnudo de minúsculas dimensiones.
La actriz Salma Hayek, al preparar su papel en la película Frida, comentó: «he visitado el museo de Diego Rivera. Sentí escalofríos al recorrer ese lugar, allí estaba Diego y el perro que tuvieron, un perro sin pelo de la raza conocida como xolotzcuincle. El perro que aparece en la película es descendiente de uno de los perros de Frida”.
La pintora, muy encariñado con su perro, se lo prestaba en las noches a su amiga la cantante Violeta Parra para que le calentase los pies en la cama.
Tiene la piel lisa y suave, cambiándole de color con los rayos de sol por efecto de la melanina. El color preferido es el negro uniforme.
También se admiten el gris y el bronce. Las manchas rosadas, una despigmentación de la piel, son toleradas en las patas y el abdomen si son pequeñas. Transpira por los pies (almohadillas y membranas interdigitales) por lo que casi no jadea.
Pelón peruano
El Pelón peruano, o perro sin pelo del Perú, es la raza que más recientemente se ha incorporado al panel canino de la F.C.I., aunque no por ello es nueva. Su presentación oficial se llevó acabo en la Exposición Mundial Canina celebrada en Dortmund (Alemania) en el año 1981 con el rimbombante nombre de Inca Orchid Monnflower dog. Posteriormente las gestiones de la cinofilia peruana permitieron que se cambiase el nombre por el de “perro sin pelo peruano”, desdeñando los tradicionales “calato” y “alco”. El nombre inglés tenía su origen en la leyenda que atribuye a estos perros, la costumbre de vivir ocultos entre las grandes orquídeas que adornaban los jardines de las casas patricias peruanas, escondite que solo abandonaban cuando se había puesto el sol y la temperatura refrescaba.
Se ha llegado a afirmar, que su introducción en Perú proviene de la inmigración china al país, como mano de obra después de que se promulgara la ley de abolición de la esclavitud en 1854. Sin embargo, en la cerámica de distintas culturas Pre-incas (Mochica, Chancay y Chimù) son frecuentes las representaciones de perros sin pelo. Gracias a ellas se ha podido datar la presencia del perro sin pelo en Perú desde la época del Preincanato, unos 300 años a. C.
El legendario alco, el perro calato peruano ha sido reconocido por el Instituto Nacional de Cultura (INC) como uno de los valores de la cultura viva de la nación peruana, lo que supuso que se firmara una resolución administrativa disponiendo la obligatoriedad en todos los monumentos arqueológicos y museos de tener un ejemplar de la raza y el presupuesto para su alimentación. Entre las ventajas de poseer uno de estos perros destaca su síndrome de hipoplasia ectodérmica, por lo que su piel caliente puesta en contacto con nuestra piel nos reconforta. Y, efectivamente, durante siglos se utilizaron como si de bolsas de agua caliente se tratase. Los curanderos además afirman que al tiempo de irradiar calor su piel absorbe la energía negativa del cuerpo humano, por lo que se le atribuyen poderes curativos.
Es muy curiosa su piel, lisa y elástica, que forma líneas casi concéntricas sobre la cabeza, alrededor de los ojos y de las mejillas, confiriéndole un curiosísimo aspecto. Puede tener vestigios de pelos sobre la cabeza, en la punta de las extremidades, la punta de la cola y a veces algunos pelos muy raros sobre el dorso.
Chino crestado
Entre la variedad de perros sin pelo, el chino crestado resulta sin duda uno de los más inusuales y atractivos por su aspecto, ya que la pigmentación de la piel es muy peculiar. Sus orígenes son muy antiguos, pues se les conocía en Europa antes del descubrimiento de América y la llegada de las razas de aquel continente, según acreditó el naturalista Félix de Azara en el siglo XVIII al estudiar las especies zoológicas americanas. Su nombre moderno lo ha recibido por la cresta de pelo que adorna su cabeza, que recuerda a la tradicional coleta china.
Es especialmente apreciado en Inglaterra y Estados Unidos. Existen dos variedades, una pelona y otra con pelo largo. Esta última posee mechones largos en la cresta, piernas y cola; el pelo debe ser sedoso y sin una longitud definida. Es un perro pequeño, activo y gracioso. Su piel es granulada y suave, caliente al tacto. En la variedad con pelo, la piel posee un suave pelo largo que recuerda a un velo.
Otras razas de perros sin pelo
Argentina considera propia una raza de perro pelo que allí se llama Pila y está extendido por toda Mesoamérica. Esta raza, verdaderamente muy primitiva, recibe diversos nombres según las regiones donde se encuentra. Algunas variedades se localizan en Ecuador y Bolivia.
La asociación canina argentina ha redactado un minucioso estándar del mismo y viene organizando anualmente el Festival del perro Pila argentino con la intención de fomentar la cría y mejora de la raza. El perro pila es una raza y en peligro de extinción cuyas características psicofísicas se adaptan perfectamente a las exigencias de la vida familiar del siglo XXI.
Menos conocido es el techichi, también llamado Chihuahua sin pelo. En realidad es una variedad histórica verdaderamente miniatura del Xolo, cuya existencia está documentada desde el siglo XIX.
En Estados Unidos se ha cruzado el chihuahua de pelo corto con el Xolo, pero el perro resultante no es exactamente igual a los techichi, que se conocen por fotos de finales del siglo XIX. En las exposiciones caninas de ese país se exhiben separados de los chihuahuas y bajo su histórico nombre de techichi.
Hasta la fecha el AKC se ha negado a reconocer al american hairlees terrier o terrier sin pelo americano, una variedad surgida por mutación espontánea en torno al año 1972 del rat terrier y que ya cuenta con numerosos aficionados. Se trata de un perro fornido, de cuello largo y orejas enveladas. Su piel, como en los otros perros desnudos, es rosada, suave, caliente y presenta pecas de variados colores.