¿Tu cachorro acaba de llegar a casa y quieres hacer todo lo posible para que tenga una buena higiene? Probablemente te estés preguntando si lavar a tu cachorro es una buena práctica. ¿Se puede bañar a un cachorro? ¿Es adecuado para su corta edad? ¿Realmente lo necesita? Si es así ¿por qué ? Tantas preguntas que rondan por la mente de cualquier nuevo dueño de un perro y sobre las que te daremos todas las claves para empezar con buen pie.
¿Por qué es importante lavar a tu cachorro en ausencia de problemas en la piel?
El baño puede convertirse rápidamente en un momento estresante para tu perro. Por lo tanto, debes acostumbrarlo desde muy pequeño para que disfrute de ello, pero no antes de sus 12 semanas (período de 3 meses después de su nacimiento cuando su madre se ocupa de su aseo).
Para ello, puedes ir paso a paso empezando por meterlo en la bañera, luego en un segundo paso abriendo el agua. También es posible poner juguetes o golosinas en el baño para que asocie el baño con un lugar agradable. Además, el baño acostumbra a tu perro al manejo que rápidamente puede volverse importante durante los problemas de salud.
¿Qué tipo de champú elegir?
La piel de tu cachorro es diferente a la nuestra. Para respetarlo, es importante utilizar un champú adaptado a tu cachorro. Los champús u otros productos que utilices tú o los de tus hijos hay que evitarlos, porque tienen un pH diferente de la piel de tu perro, lo que podría dañar sus barreras epidérmicas. Por lo tanto, se recomienda utilizar un champú canino ultrasuave para pieles sensibles.
Precauciones a tomar para un lavado exitoso
Al contrario de un perro adulto, las defensas inmunitarias de tu cachorro aún no son completamente funcionales. Por ello, es vital preparar el lavado de su cachorro con el fin de evadir la hipotermia. Para comenzar, debes elegir un lugar cómodo para ti y para él: un fregadero será mejor para un cachorro pequeño y un baño o ducha para uno cachorro más grande. Para conseguir que tu cachorro no resbale, se recomienda hacerlo en una superficie antideslizante. Si no tienes una, puedes colocar una toalla mojada en el fondo de la bañera.
También es necesario asegurarse de que la habitación donde se realizará el lavado permanecera a temperatura ambiente. La temperatura del agua debe rondar los 38°C. El tiempo de lavado no debe ser demasiado largo o tu cachorro podría enfadarse.
Después del baño tendrás que pensar en secar bien a tu perro con una toalla y luego un secador de pelo si es necesario. De nuevo tendrás que ir paso a paso, porque el secador de pelo podría asustar a tu cachorro.
¿Con qué frecuencia debes bañar a tu cachorro?
La frecuencia de lavado varía según el tipo de pelo de tu mascota. Si tu cachorro tiene pelos largos, puedes lavarlo 1 vez al mes si tiene la cabello corto es una vez cada 2-3 meses. Es importante respetar esta frecuencia a riesgo de dañar la capa de sebo que protege la piel de su acompañante contra las agresiones externas.
¿Qué otros cuidados para la piel y el pelaje se recomiendan para mi cachorro?
Si tu cachorro tiene el pelo largo o semilargo, será necesario cepillar una vez a la semana o al día dependiendo del tipo de cabello. Esto eliminará los nudos, pero también eliminará la capa inferior muerta. Para llevar a cabo un cepillado óptimo del cabello, existen cepillos, cartulinas, peinetas o incluso guantes formados por alfileres a menudo metálicos. Estas espigas pueden ser de mayor o menor longitud en función del uso que se vaya a hacer de ellas (simple desenredado o eliminación del subpelo). Para que tu cachorro se acostumbre al aseo, primero puedes usar un cepillo suave.
Para que la higiene de tu mascota sea respetada y más completa, se recomienda limpiar los oídos con una loción adecuada. También puedes lavar los ojos del perro para eliminar las impurezas. Desde suero fisiológico o un solución de lavado de ojos los limpiará sin dañar los ojos de tu perro.
Si quieres saber mas te contamos si puedes bañar a un perro con shampoo de personas.